Buenos Aires, 13 junio (PR/19) — El ex ministro de Hacienda y Finanzas Públicas de la Nación, Alfonso Prat Gay, manifestó hoy que “la decisión de incorporar a alguien extrapartidario en la fórmula fue una decisión correcta, independientemente de los nombres.
“En particular, el senador Pichetto ha sido un elemento muy importante para la supervivencia de este gobierno en los primeros meses, en donde no teníamos mayoría en ninguna de las dos cámaras”, DIJO.
El economista se expresó hoy en el cierre de la 7ma edición de Argentina Visión 2020/40, un encuentro de reflexión y diálogo para el sector agropecuario organizado por el Centro de Agronegocios de la Universidad Austral, ADBlick Agro y Bioceres. La actividad se llevó a cabo en las instalaciones del Centro Cultural de la Ciencia en Godoy Cruz 2270, CABA.
Declaraciones de Alfonso Prat Gay
“Podemos cambiar el rumbo de manera sostenida, y creo que en alguna medida lo estamos haciendo en un mundo muy incierto, con muchos condicionantes y obstáculos internos, prejuicios que dificultan ese recorrido de cambio. Pero este gobierno ha sentado las bases para ello”.
“La integración al mundo que ha logrado este gobierno es algo que deseamos que no vuelva atrás y es un punto de partida para muchas de las cosas que se ha discutido a lo largo del día de hoy. Una argentina cerrada, de espaldas al mundo, ya sabemos los resultados que genera”.
“Hay un apoyo notable de la economía internacional hacia la Argentina, y no solamente hacia la gestión del presidente Macri, sino también hacia una Argentina que vuelva a ser integral, confiable y una Argentina tiene muchísimo para dar. Que tiene una potencialidad muy grande que es imposible imaginarla llevada al acto dentro de un mercado interno muy chiquito, tenemos que agrandar ese mercado interno”.
“Ha habido también un esfuerzo muy grande de ordenamiento fiscal, que se ha hecho en medio de una situación económica compleja y dentro de un largo proceso de recesión. Esto ha requerido de una valentía política que no hemos visto en la historia del país. Se ha hecho sin cepos, sin mentiras, sin negar una realidad y siendo conscientes de que hicimos el diagnóstico de dónde estamos y hacia dónde queremos ir”.
“Cuando la historia juzgue estos años de gobierno, este fue el inicio de un recorrido en el que efectivamente se ha cambiado el rumbo de manera sostenida”.
“Con respecto a lo que ha sucedido en los últimos días, Argentina es todo futuro y potencialidad, y toda rosca en el día a día”.
“Lo más importante de los últimos anuncios y decisiones y que refuerza la idea del cambio que se inicia es que el gobierno aprendió la lección, quizás tardó demasiado en aprenderla, y es que “solos no se puede”. No alcanza con un presidente y un gran gabinete, ni con una coalición de partidos políticos. Los problemas en Argentina son demasiados complejos como para creer que los podemos resolver solos”.
“El principal error de este gobierno ha sido político, más allá de algunas fallas técnicas. Primero por no acordar y segundo por no enamorar. Creo que hubo muchas instancias en las que se podía acordar, apenas ganadas las elecciones del 2015 y del 2017”.
“La decisión de incorporar a alguien extrapartidario en la fórmula fue una decisión correcta, independientemente de los nombres”.
“En particular, el senador Pichetto ha sido un elemento muy importante para la supervivencia de este gobierno en los primeros meses, en donde no teníamos mayoría en ninguna de las dos cámaras”.
“Siempre encontré en Miguel Ángel Pichetto a alguien que, más allá de las diferencias políticas, imponía el objetivo común de una Argentina próspera y en crecimiento”.
“Muchos veníamos reclamando este tipo de decisión dentro de la Coalición de Cambiemos”.
“En estas elecciones no hay fórmulas presidenciales puras, lo que es una señal de que los distintos espacios políticos entienden, por convicción o necesidad, que solos no lo pueden hacer. Esta también ha sido la decisión de la ex presidenta CFK, que se corrió al segundo lugar y que convocó a alguien con quien durante los últimos años estuvo peleada a muerte”.
“Estamos entrando en una nueva etapa de la discusión política”.
“Lo que va a venir después de la elección es una oportunidad de lograr un gran acuerdo nacional y una concertación lo más amplia posible que además tenga la vocación de dialogar con los que se quedaron afuera, algo que no se hizo en 2016”.
“Hace falta un acuerdo social, diálogo y consenso, pero hace falta también que ello se ratifique no solamente en una fórmula presidencial o en un acuerdo parlamentario, sino que tiene estar en rubricado a partir de los partidos, pero también representado en los gabinetes. Tiene que haber un norte, quizás sea en 2030 o 2040, en el que convoquemos al que piense diferente”.
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