El sector norte de la principal zona agrícola argentina se encuentra en emergencia agropecuaria al registrar un déficit hídrico que no tiene probabilidad de revertirse en función de los pronósticos climáticos vigentes a la fecha.
El pasado 9 de julio el pronóstico elaborado por Climate Prediction Center e International Research Institute for Climate and Society (CPC/IRI) elevó a un 54% la probabilidad de ocurrencia de un evento “Niña” en el último cuatrimestre de 2020. La última vez que la Argentina atravesó una fase “Niña” (campaña 2017/18) registró una sequía que provocó un desastre productivo.
Cuando aún faltan semanas para el eventual ingreso a una fase “Niña”, la mayor parte de la provincia de Córdoba y el sur de Santa Fe registran un déficit hídrico importante.
“En el sur de Santa Fe es el trimestre con menos lluvias de los últimos cien años. Ya hay focos de sequía extrema; en Córdoba se estiman 65.000 hectáreas trigueras en malas condiciones. Con fuertes heladas y seco, los últimos días de julio y los primeros de agosto no dan señales de lluvias”, alertó un informe publicado esta semana por la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
“Desde el 1 de mayo de 2020 no llueve de forma importante en Córdoba: ya van 88 días con registros mínimos. Pero tampoco ha llovido sobre gran parte del sur de Santa Fe y esto es algo muy atípico para las estadísticas históricas”, añadió.
En la localidad santafesina de Venado Tuerto –epicentro de la zona núcleo pampeana argentina integrada por el sudeste cordobés y el noroeste bonaerense– desde comienzos de mayo pasado a la fecha se registraron apenas 2,7 milímetros de precipitaciones, la marca más baja desde el año 1915 para ese período.
“En el sur de Santa Fe, aún con reservas de humedad en las capas profundas del suelo, si no llueve de forma importante en 20 días, los rindes van a caer en picada”, advirtió la BCR.
En el norte argentino también se presente un déficit hídrico importante. “En Chaco y Santiago del Estero, si no llueve en 25 días, gran parte de los lotes sembrados pueden perderse”, apuntó el informe.
En los años caracterizados por un evento “Niña” las precipitaciones registradas en el último trimestre del año en la zona núcleo pampeana suelen ser significativamente inferiores respecto de los episodios “Niño”, lo que constituye una señal amarilla para el maíz de siembras tempranas, que podría resultar afectado en 2020/21 por una eventual restricción hídrica.
Hasta el momento ninguna autoridad provincial ni nacional se manifestó a favor de declarar en emergencia agropecuarias a las localidades cordobesas y santafesinas afectadas por restricciones hídricas.
Al tratarse de la principal fuente genuina de generación de divisas, una falla productiva en la campaña agrícola 2020/21 podría comprometer las principales variables macroeconómicas y sociales de la Argentina.
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Fuente: valorsoja.com
