Buenos Aires, 12 de enero (PR/22).- El Servicio Meteorológico Nacional informó que esta semana se sentirá una ola de calor atípica en la región.
La condición climática afectaría estos días a las provincias de Rio Negro, Neuquén, Mendoza, La Pampa, Buenos Aires, San Luis, San Juan, La Rioja, Catamarca, Tucumán, Salta y de Jujuy, Santiago del Estero, Chaco, Formosa, Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos, Corrientes y Misiones.
Según el SMN, en una ola de calor la temperatura del aire experimenta un aumento excepcional durante tres o más días consecutivos. De este modo, las temperaturas máximas y mínimas son más elevadas, superando ciertos umbrales climatológicos. Entre sus causas se pueden mencionar: el fenómeno de La Niña, el sistema elevado de presión en el norte y centro de Argentina, el cual habilita una masa de aire cálido desde el norte y la baja humedad.
Cindy Fernández, meteoróloga del SMN, también reflexiona que las olas de calor extraordinarias “ocurren una vez cada cierta cantidad de años”, pero que es “esperable que con el cambio climático, episodios como este empiezan a ser un poco más frecuentes”. La ola de calor no es generada por el cambio climático, sino que “lo que hace el calentamiento global es que estos períodos cálidos sean más frecuentes o más probables de lo que eran hace 40 años”.
El servicio oficial, que estudia las temperaturas, llegó a la conclusión de que este viernes 14 de enero el ambiente superaría los 40° grados Celsius, batiendo un récord. El 18 de diciembre de 1995 la temperatura llegó a los 40.5°C. Hay probabilidades de que esta cifra se repita, e incluso supere.
El problema global del cambio climático, que ya empezó a sentirse, es motivo de preocupación de la ONU, diversas organizaciones y personalidades que accionan contra el cambio climático, quienes manifestaron a través de distintos medios sus reflexiones. El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) subraya que “el cambio climático inducido por el hombre es el principal impulsor de estos cambios”.
Enero es un mes caracterizado por incendios y sequías, por lo que este contexto agravaría aún más las vicisitudes. Estas vicisitudes generan, entre tanto, inundaciones, y cortes de luz y agua que afectan a un significativo número de habitantes.
Bajo este marco, Marcelo Corti, Director Ejecutivo del Centro de Desarrollo Sustentable GEO, opina que “Empiezan a notarse las consecuencias de algo que naturalmente vemos lejano, como el cambio climático. La ola de calor nos afecta en nuestro día a día, con el agravante de que en nuestro país eso implica cortes de energía”.
El Gobierno Nacional se refirió al tema de interrupciones de agua y electricidad. Se pronunció la posibilidad de realizar cortes debido a la afectación que suceden las altas temperaturas a las usinas y sistemas de transmisión eléctrica y sistemas que inciden sobre la distribución de agua. Sumado a esto, la demanda de refrigeración por parte de la población, satura la capacidad energética.
A partir de estas posibles situaciones, el Gobierno Nacional también encara una campaña de concientización sobre el uso de energía y agua, luego de que la semana pasada el AMBA se viera afectada con interrupciones eléctricas. El día de ayer más de 700.000 personas del AMBA se vieron afectadas por un apagón masivo.
Corti reflexiona que “es fundamental planificar para no padecer, como lo está haciendo la población en este momento.
Creer que lo vinculado a lo ambiental no nos va a afectar es un error gravísimo, donde Argentina podría ser el país con más calor del mundo en esta semana. El cambio climático ayuda a que la pasemos mal, y por eso hay que accionar”.
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Fuente: Prensa GEOCentro de Desarrollo Sustentable de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires
