Mientras los contagios con la variante Ómicron no cesan entre la población, en el sector de la maquinaria agrícola el ausentismo laboral por COVID-19 ha crecido en los últimos días, a raíz de los casos positivos y de los contagios estrechos.
En aquellas empresas que han mantenido la actividad, sin cierre por vacaciones, el nivel de ausencias entre los empleados por motivos sanitarios ronda entre el 15% y llega hasta 25%.
Dentro de ese universo, se estima que la mitad del personal no concurre por ser portadores del virus y que el otro 50% es por ser contagio estrecho de personas infectadas.
Con buena parte de las empresas sin actividad por vacaciones, el regreso del personal plantea algunos desafíos para mantener los niveles de actividad, sin verse afectados por la cuestión sanitaria.
Cambio de figura
La decisión del gobierno de Córdoba de eliminar, a partir del próximo lunes 17 de enero, la figura del contacto estrecho laboral para aquellos trabajadores que tengan el esquema de vacunación completo (luego de pasados 14 días de la segunda o tercera dosis correspondiente), fue bien recibida entre las empresas del sector.
Para Luciana Mengo, titular de la Asociación de Fabricantes de Maquinaria Agrícola y Agrocomponentes de Córdoba (AFAMAC) el cambio ayudará a reducir el ausentismo que hoy tienen las fábricas y a no perder nivel de actividad.
“Es una medida que solicitamos porque considerábamos que, con el testeo correspondiente, el trabajador que no estuviera contagiado podía desempeñarse en las empresas sin riesgos sanitarios para terceros”, aseguró la empresaria.
De acuerdo al nuevo criterio, este trabajador podrá continuar su actividad laboral con un test de antígeno negativo: uno al momento de identificación del contacto y otro al cuarto día del contacto con el caso positivo.
La Nación difundió un criterio parecido, pero reservó la flexibilización para quienes cuenten con tres dosis.
Autotesteos
El sistema de autotest que en la actualidad se está probando, como prueba piloto, en cinco empresas de la provincia de Córdoba (ninguna de ellas es de maquinaria agrícola), es una medida que desde las cámaras industriales ven como positiva.
Aseguran que es una manera de que los trabajadores vuelvan a prestar servicio, pero con un criterio de control y de testeos que las empresas están dispuestas a llevar a cabo de manera rutinaria
“Haciendo cálculos, con una fracción de horas de trabajo que se recupere se paga el autotest, por el hecho de tener rápido el resultado y no tener que hacer ir al trabajador a hacer el testeo a un centro habilitado, con la pérdida de tiempo que ello genera. Es algo que se puede hacer dentro de las empresas”, aseguró Eduardo Borri, presidente de la Cámara Argentina de Fabricantes de Maquinaria Agrícola (CAFMA).