Y realmente la segunda quincena hizo un corte (aunque sea momentáneo) del “soplete” que sufrimos durante la primera.
El mismo 15 de enero empezamos a escuchar que en algunas zonas cayeron algunas lluvias, muy desparejas entre zonas. A pocos kilómetros de distancia, grandes diferencias. Ya el domingo se sumaron algunas más, y lo mejor es que además bajaron las temperaturas.
En muchos casos este cambio de clima llegó tarde, y eso queda plasmado en las últimas estimaciones. Por ejemplo la de la Bolsa de Comercio de Rosario, que redujo desde su estimación anterior (diciembre), 8 mill tn de maíz dejándolo por el momento en 48 mill tn, y a la soja con una expectativa de 40 mill tn, cuando en su momento se llegó a estimar que con buen clima se podría acercar a 48 mill, luego a 45 y en vistas de ese soplete tan terrible las expectativas bajaron abruptamente.
De todas maneras, en muchos otros casos las lluvias y bajas temperaturas son más que bienvenidas.
Considerando los datos de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires al 13 de enero, los más castigados han sido los cultivos mas tempranos, ya que el maíz temprano a esa fecha estaba 50% en polinización y las sojas de primera un 13% en definición de vainas. Por lo tanto de continuar estas lluvias podemos pensar en que se podría detener la pérdida productiva.
El mercado ha venido siguiendo de cerca lo que ocurría tanto en Brasil como en Argentina, Paraguay, Bolivia y hasta Uruguay, mas allá que “el volumen” clave lo aporta Brasil. Con semejante sequía cada pérdida de tonelaje cuenta.
Ya tenemos claro que los mercados van y vienen en base a expectativas, y que se cumplan después o no impacta sobre el precio. Y así pasamos de estimaciones que ponían la producción de soja de Sudamérica superando en las 200 mill tn, a empezar a ver que no será posible.
En medio de las caídas de producción de Brasil (pasaron de estimaciones mas optimistas de 145 a inclusive algunas consultoras hablando ahora de 132,3 mill tn de Safras & Mercados por ejemplo), y de Argentina, el mercado en Chicago desde mediados de diciembre subió 11%, mientras que el local 9% en la disponible PERO 13% en la mayo22.
Al mismo tiempo que caían las estimaciones de soja, caían las de maíz. Pero en este caso Chicago no tuvo la misma reacción que con la soja, en mismo período recuperó sólo 2%. El que sí ganó fue el mercado local (con suba de 7% en disponible y 10% en abril 22).
Pero yendo de nuevo a las expectativas vs los datos, una vez que el mercado asimiló los nuevos valores de producción y miró pronósticos de lluvias… los precios se desinflaron (muy poco, pero perdieron parte de las subas, sólo 3%).
Entonces, si estás recibiendo lluvias, sos de los que siguen en carrera, y además el mercado te da la posibilidad de poner pisos sin ni siquiera vender/comprometer mercadería, aprovechá. Por que los mercados así como dan oportunidades las sacan de un momento al otro.
Primicias Rurales
Fuente: Agrofy News