A esto se le suman otras causas que provocaron una elevada volatilidad en el mercado. Por un lado EE.UU. transcurrió una campaña seca afectando el potencial de rendimiento del trigo norteamericano, sumado a los bajos stocks luego de que las principales economías hayan realizado grandes importaciones para asegurar su suministro en la post pandemia. China con una economía más estancada, con proyecciones de crecimiento para el 2022 a una tasa menor al 4,5%. Argentina y Brasil frente a una campaña donde se pronostican buenos rendimientos, pero con un efecto negativo en los márgenes del productor por el elevado costo de los fertilizantes tanto fosforados como nitrogenados, estando atento el mercado a la probabilidad de clima seco en algunas regiones productoras. Y por último, un incremento de los fletes internacionales de un 43% a un 50% desde el comienzo de la guerra.
Yendo al núcleo del problema, aparecen dos países que son Rusia, primer exportador de trigo mundial (33 mill. de t en la campaña 21/22) y Ucrania, tercer exportador mundial (19 mill. de t en el ciclo 21/22). El conflicto trajo problemas en la comercialización mediante los puertos del Mar Negro, imposibilitando sus exportaciones durante un largo plazo, y actualmente en busca de una solución. Es por esto, que la ONU está realizando intensas negociaciones para que se vuelvan a utilizar estos puertos, que no debemos de olvidar que muchos fueron invadidos y afectados por bombas y misiles. Las Naciones Unidas temen que se intensifique el problema y éste afecte el suministro de alimento en especial, a países africanos. Debemos estar atentos a lo que vaya ocurriendo, ya que si se logra un acuerdo y se flexibiliza el comercio, se podría observar un efecto bajista sobre las cotizaciones del cereal.
Por último, resulta interesante comentar la situación actual de los precios del trigo tanto en el mercado interno como en el internacional. Localmente, la volatilidad no se ve reflejada de igual manera que en el mercado internacional. Esto se debe al llamado “volumen de equilibrio” colocado semanas atrás por el gobierno nacional. Las exportaciones limitadas provocaron un estancamiento en los precios internos, mientras que, respecto a las cotizaciones en Chicago, como se observa en el gráfico, cada hecho se vio reflejado en subas y bajas en los precios. Actualmente podemos observar una caída de 80,5 usd/t en la posición julio, la cual al día 02/06 cotizaba en torno a los 388 usd/t luego del máximo en mayo de 469 usd/t.
Como conclusión es fundamental seguir de cerca los hechos que vayan ocurriendo y la evolución del conflicto bélico.
Por Félix Duncan El autor es analista de mercados de AZ Group.