Esta iniciativa es producto del trabajo interinstitucional que comenzó a desarrollarse tras la declaración de emergencia por la especie llamada comúnmente tucura sapo dispuesta por el Senasa en 2020; que generó la “Guía de recomendaciones para monitoreo y control de la tucura sapo”, entre otras actividades de capacitación y comunicación.
Las tucuras son insectos que pueden afectar a la actividad agrícola en forma directa y a la actividad ganadera, de forma indirecta – dado que se alimentan de los recursos forrajeros – y producir daños, también, en la vegetación nativa. Cabe destacar que no afectan a las personas y animales.
La Patagonia es hábitat natural de la tucura sapo y especies del género Dichroplus conocidas como las tucuras aladas. En ese sentido, el monitoreo temprano es necesario para su detección precoz y por eso, el Comité recomienda realizar inspecciones periódicas, sobre todo, en aquellos sitios en donde hubo antecedentes de alta densidad y daños por tucuras, tanto en los pastizales naturales, como en zonas de mallines y cultivos. Se estima que los primeros nacimientos se producen desde fines de invierno en la tucura sapo y en primavera en las tucuras aladas.
Por consultas o dudas al respecto, se puede consultar la mencionada “Guía de recomendaciones para monitoreo y control de la tucura sapo” o comunicarse al correo electrónico: acridios@senasa.gob.ar o a la línea gratuita 0800-999-2386