1- La cosecha de soja impulsa las ventas en el mercado local.
La cosecha de soja logró tomar impulso y aceleró su paso, respondiendo a una mejora en las condiciones climáticas. Los datos oficiales indican que al jueves de esta semana se recolectó soja en el 77% del área sembrada, lo que advierte un avance de 16 p.p. entre semanas. No obstante, la cosecha aún muestra un importante retraso respecto de los datos históricos, siendo que en la misma fecha del año anterior se registraba un avance del 81%, en tanto el promedio de los últimos cinco años se ubica en el 85%. Los días de lluvias y alta humedad que retrasaron la recolección se visibilizan en la calidad de la mercadería cosechada, siendo que algunos lotes se levantaron con excesos de humedad en grano, y en muchos casos se han reportado granos manchados y dañados.
Aun así, el mayor ritmo de cosecha observado en las últimas semanas ha dinamizado la comercialización de la oleaginosa en el mercado interno. Según los datos de la Secretaría de Bioeconomía, en las primeras dos semanas de mayo las compras internas de soja totalizaron 2,5 Mt, lo que indica una comercialización semanal promedio de 1,3 Mt. Esto difiere enormemente de la situación que se observaba en abril, cuando la comercialización semanal promedio alcanzaba apenas 0,6 Mt.
La mejora en la cotización de la oleaginosa también llevó a que durante las dos primeras semanas del mes se fijara precio para 2,6 Mt de mercadería. En consecuencia, al 15 de mayo el 33% de la cosecha estimada de 50 Mt ya se encontraba vendida en el mercado local, y la proporción de mercadería con precio ascendía al 14%, aún por detrás de los datos históricos.
La disponibilidad de suministros y el mayor dinamismo comercial de soja de las últimas semanas impulsan el traslado de granos hacia la zona portuaria del Up-River, región donde no sólo la mercadería tiene como destino la exportación sino donde se concentra cerca del 80% de la capacidad de procesamiento de oleaginosas de nuestro país. Sólo en lo que va de mayo, ingresaron al Gran Rosario más de 116.100 camiones con soja, lo que arroja un promedio diario de más de 5.500 camiones.
La mayor disposición de mercadería favorece principalmente a la industria aceitera, que durante el año 2023 registró el menor volumen de molienda en 19 años debido a la brutal sequía que marcó la campaña previa. Este año, el panorama resulta más alentador.
Según datos oficiales, el crushing de soja del mes de abril ascendió a 3,8 Mt, marcando un incremento del 33% respecto del mismo mes del año anterior, e incluso ubicándose un 3% por encima del promedio mensual del último lustro. La molienda acumulada durante el primer cuatrimestre del año totalizó entonces 11,2 Mt y, considerando las estimaciones de Oil World para el mes de mayo, el crushing alcanzaría 15,3 Mt hacia finales del quinto mes del año, en línea con el promedio histórico.
Cabe destacar que la elevada molienda de abril se corresponde con un considerable volumen de importaciones. De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), durante el cuarto mes del año se realizaron compras al exterior por 750.000 toneladas de poroto de soja, lo que representa la quinta parte del volumen de soja procesado. Del total importado, el 93% provino de Paraguay, el 6% desde Brasil, y el restante 1% desde Bolivia.
2- La mayor proporción de maíz tardío disminuye las exportaciones en mayo.
En lo que respecta a la cosecha de maíz, la Secretaría de Bioeconomía informó que el avance de las labores ascendía al 36% a este jueves 23, mostrando también cierto rezago respecto a años anteriores. Hay que tener en cuenta que en esta campaña el 67% de las hectáreas sembradas corresponden a maíz tardío, cuando el promedio de los últimos cinco ciclos arroja una proporción del 58%, por lo cual tiene sentido que el grueso de la cosecha se registre en los próximos meses.
La mayor proporción de maíz tardío se hace sentir sobre la logística interna hacia los puertos. Se estima que, desde el comienzo del mes de mayo hasta hoy, ingresaron cerca de 44.100 camiones con maíz a la zona portuaria del Gran Rosario, un promedio de 2.100 camiones por día. En una comparación histórica, el promedio de los últimos cinco años (descontando el atípico año 2023) muestra que el ingreso diario de camiones con maíz a la zona del Up-River durante mayo es de 2.600; es decir, un 23% superior.
Como consecuencia, según datos de la Agencia Marítima NABSA S.A. (NABSA), el volumen de toneladas de maíz embarcado durante el mes de mayo ascendería a 3,2 Mt, por detrás del volumen observado durante las últimas cinco campañas, a excepción de la anómala campaña 2022/23.
3- Cotizaciones y panorama internacional.
Llevando la mirada hacia el plano internacional, durante la última semana tanto la soja como el maíz registraron alzas en el mercado de Chicago. El contrato de mayor volumen operado de la oleaginosa alcanzó este jueves un precio de referencia de US$ 456,1/t, más de US$ 9/t por encima del precio del jueves previo, en tanto el maíz finalizó con un alza intersemanal del 5% para ubicarse este jueves en US$ 255/t.
El factor alcista continuó siendo la preocupación en torno a la producción sudamericana, principalmente de Brasil. Por un lado, las inundaciones en el sur del país han afectado el avance de la cosecha de soja en el estado de Rio Grande do Sul, región donde la Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab) de Brasil estima que se produciría el 15% de la cosecha de soja 2023/24. Esta semana, el organismo informó que el avance de la cosecha en la región ascendía al 85%, 9 p.p. por detrás del promedio de los últimos cuatro años, retraso que repercute negativamente no sólo en el rinde sino en la calidad del grano.
En contraste, Paraná y Mato Grosso do Sul, dos de los mayores estados productores de maíz, registraron un tiempo seco y caluroso durante marzo y abril. De acuerdo con datos de la consultora Agroconsult, el rinde del maíz de segunda, también conocido como zafrinha, en el estado de Paraná caería un 8,2% respecto de la campaña previa, en tanto en el estado de Mato Grosso do Sul la caída sería del 30,3%. Como consecuencia, la consultora recortó esta semana su estimación de cosecha de maíz de segunda 2023/24 de Brasil, la cual representa entre el 70% y el 80% de la producción nacional, situándola un 10,5% por debajo respecto del ciclo 2022/23.
Primicias Rurales
Fuente: BCR