COP16: pocos avances en una reunión sin cierre

El llamado “Fondo de Cali” dedicado a compartir los beneficios derivados del uso de información de secuencias digitales de recursos genéticos y la presentación de la Argentina de su nueva Estrategia de Biodiversidad son algunos pasos hacia delante de la reunión en Colombia que pareciera haber quedado inconclusa.

El sábado finalizó la 16° Conferencia de la Convención de Diversidad Biológica (CBD), más conocida como COP16, en Cali, Colombia. Esta decimosexta reunión sobre diversidad biológica de las Naciones Unidas (COP, por sus siglas en inglés) reunió a 196 partes –entre países y conjuntos de países–en el marco de la CDB, un convenio internacional surgido luego de la Cumbre de la Tierra de Río de Janeiro en 1992.

El foco clave en esta reunión era lograr acuerdos para implementar el Marco Mundial de Biodiversidad Kunming-Montreal (MMB-KM) adoptado en la COP anterior, donde se establecieron 23 metas para lograr frenar y revertir la pérdida de biodiversidad a 2030.

Sin embargo, luego de dos semanas de discusiones y una maratón de 24 horas de negociaciones finales, las cuestiones sobre la creación de un nuevo fondo de biodiversidad para países en desarrollo, así como las modalidades acerca de la revisión global del progreso en la implementación del MMB-KB, así como otras decisiones clave, fueron postergadas y la reunión suspendida, pues ya no había suficientes negociadores en la sala para tomar decisiones.

Kirsten Schuijt, Directora General de la Organización Mundial de Conservación (WWF por sus siglas en inglés) agregó: “A pesar de los decididos esfuerzos de Colombia y del incansable trabajo de muchos negociadores para construir consensos y tender puentes entre los países, este resultado pone en peligro la implementación del Marco Global de Biodiversidad Kunming-Montreal. Nadie debería estar conforme con esto, ya que nos afecta a todos. Cumplir la misión de detener y revertir la pérdida de la naturaleza para 2030 nunca iba a ser fácil, pero ahora estamos peligrosamente fuera de curso.”

Bernadette Fischler Hooper, Líder de Incidencia Global de WWF-Reino Unido. “El desacuerdo entre los países donantes y en desarrollo poco antes de la suspensión de la reunión, aunque lamentable, no es sorprendente. Los países han estado divididos durante años y no han logrado encontrar una solución que funcione para todos. Sin embargo, postergar más la urgente decisión sobre el fondo destinado a la CBD pone en riesgo el cumplimiento de las metas de naturaleza para 2030,” agregó.

Puntos destacados

Entre los puntos destacados se señala que 196 países acordaron establecer un nuevo fondo global dedicado a compartir los beneficios derivados del uso de información de secuencias digitales (DSI por sus siglas en inglés) de recursos genéticos.

La decisión sobre el llamado “Fondo Cali” establece que las empresas que utilicen información de secuencias digitales (DSI) de recursos genéticos en sus productos deberán destinar una parte de sus ganancias o ingresos al fondo. Si bien los detalles sobre la distribución aún se están definiendo, se ha acordado que el 50% del fondo se destinará a pueblos indígenas y comunidades locales, ya sea de forma directa o a través de los gobiernos. Esto permitirá que finalmente se compartan las ganancias con dichas comunidades, incluidas mujeres y jóvenes.

Kirsten Schuijt, Directora General de la Organización Mundial de Conservación (WWF por sus siglas en inglés) dijo: “El nuevo ‘Fondo Cali’, aunque imperfecto y con muchos detalles por resolver, es un paso importante. Este fondo asegura que las empresas que se benefician de la naturaleza contribuyan de forma justa a la conservación de la biodiversidad y se dirijan fondos esenciales a las personas y lugares que más los necesitan”.

Por otra parte, al cierre de la COP16 se presentaron 44 Estrategias y Planes de Acción Nacionales sobre Biodiversidad (ENBPA) revisados​​ y 119 Partes habían enviado Metas Nacionales revisadas, lo que representa alrededor del 63% de los países, un aumento sustancial frente a los días previos a la COP, cuando menos de la mitad de los países habían publicado planes u objetivos.

Argentina fue uno de los 44 países que presentaron su Estrategia Nacional de Biodiversidad y Plan de Acción a 2030 (ENBPA). Para el armado de la ENBPA existió un proceso de participación en el que organismos estatales nacionales y provinciales, y diferentes sectores de la sociedad que son parte de la CONADIBIO, hicieron sus aportes a las consultas realizadas por las autoridades. En base a estos aportes, la Subsecretaría de Ambiente de Nación elaboró una propuesta que fue enviada a la Cancillería para su revisión a los fines de realizar la entrega formal ante la Convención de Diversidad Biológica.

Manuel Jaramillo, director general de Fundación Vida Silvestre Argentina afirmó: “Desde Fundación Vida Silvestre Argentina reconocemos la importancia de este proceso y valoramos el cumplimiento por parte del país de presentar su ENBPA actualizada, dado que es la herramienta principal para cumplir con los objetivos del Marco Mundial de Biodiversidad de Kunming-Montreal. Sin embargo, vemos con preocupación algunos puntos de la misma. Nos preocupan los aspectos vinculados a las metas de género y de cambio climático que diluyen las ambiciones globales. Además, falta profundizar el trabajo para mejorar aspectos vinculados a las metas, finales e intermedias, la falta de temporalidad en muchas de las generadas y la ausencia de indicadores que permitan medir el progreso. Por último, no están definidos los medios de implementación ni fondos asociados”.

También hubo progresos notables en algunas áreas como la integración de la biodiversidad en sectores clave, con el lanzamiento de un nuevo Grupo de Champions de Integración liderado por el gobierno y apoyado por 18 Partes (que está en aumento). La adopción de un plan de acción sobre biodiversidad y salud, y el establecimiento de un órgano subsidiario y un programa de trabajo para garantizar la participación efectiva de los pueblos indígenas y las comunidades locales. Asimismo, se acordaron los procedimientos para describir Áreas Biológicamente y Ecológicamente Significativas (EBSAs) en los océanos, también fueron avances significativos, siendo este último un paso clave hacia la meta de conservar el 30% de las áreas oceánicas para 2030. La COP16 también vio una participación sin precedentes del público, incluida la primera Zona Verde del CDB de la ONU en Cali.