La etapa de monitoreo a campo previo a la siembra y posterior a la implantación de los cultivos, siempre será clave para el éxito de la campaña: el ojo del amo engorda el ganado, aplica también para la agricultura.
Por: Jeremías Drobot
Cabe tener en claro que la digitalización viene a ayudar al monitoreo tradicional, no lo reemplaza en absoluto, solo lo direcciona para llegar más rápido, ahorrando en horas de recorrida y combustible. Es por esto que la pala, calador, balde, bolsas, lupa, cuchillo, centímetro y el paño de monitoreo, entre otros, siempre serán importantes y seguirán en la caja de la camioneta del agrónomo.
Pero ahora llegan herramientas digitales que pueden acoplarse para eficientizar todos los momentos de monitoreo de cultivos en los meses que corren.
Imágenes satelitales
Las plataformas entregan imágenes satelitales de forma periódica sobre los lotes previamente delimitados. La frecuencia dependerá del satélite que la misma utilice y la calidad de estas puede variar en torno a la nubosidad del día. Pero como mínimo una vez a la semana llegará esta “radiografía” del lote.
Además del conocido NDVI, índice de vegetación normalizado -por sus siglas en inglés-, que las plataformas transforman y adaptan teniendo en cuenta la escala de verde en el período crítico de los cultivos, en el paquete de imágenes recibidas existen otros formatos de mapa adicionales que ayudarán al monitoreo.
Con escalas simples de colores y muy visibles, el productor podrá tener un pantallazo de zonas a atender. Y en base a imágenes previas y el conocimiento de las particularidades del lote, determinará la gravedad del asunto y necesidad de dirigirse al lugar a ver qué sucede.
Ejemplo: puede ser que el cambio de color sea porque se trate de un bajo inundable o que el cultivo se esté secando al acercarse la cosecha, o bien que una plaga está creciendo o una deriva de un vecino haya afectado una franja del lote, y en estos casos el atendimiento será totalmente distinto.
Ambientación
La facilidad de ambientar lotes según la información previa que se haya cargado en el programa es una ventaja grande con la que cuenta el agrónomo a la hora de moverse por el lote. Teniendo en cuenta, imágenes satelitales previas de cultivos, mapas de rinde o de suelo, resulta muy sencillo crear diferentes ambientes según el grado de especificidad que se quiera.
Y a la hora del monitoreo, el análisis espacial puede servir para diferentes tareas: muestreos de suelo en cada uno de los ambientes, análisis diferencial de la presión de plagas y malezas según los distintos entornos de luz y humedad, o realizar estimaciones de rinde ponderando la superficie de cada subregión, entre otros tantos usos.
Smartphone y/o tablet
Estos dispositivos tendrán múltiples usos a la hora de hacer una recorrida eficiente. En primer lugar, ir al lote con la marcación determinada en la computadora o mismo con celular desde la oficina permitirá llegar sin dar vueltas al punto a atender, con ahorros de tiempo y sin pisotear de más el lote.
Una vez allí es posible utilizar la cámara y los softwares para lo que se requiera en el momento, siendo los más destacados en funcionalidad: la determinación del stand de plantas, la identificación digital de malezas, y poder utilizar ahí los protocolos con umbrales de adversidades.
Anotaciones georreferenciadas
Resulta determinante tomar nota de forma digital in situ, teniendo en cuenta que los cuadernos y el traspaso de la información requiere una prolijidad y atención grande que muchas veces puede verse alterada en los equipos de trabajo a campo. Anotar todo lo que se ve, sacar fotos y hasta grabar audios, es posible en las plataformas de monitoreo agrícola.
La precisión de datos y su facilidad para compartirlos entre los colegas son clave para llegar a tiempo con información completa y actuar rápido frente una adversidad o realizar toda la logística que las labores requieren.
Reportes digitales y órdenes de trabajo
Registrar todos los trabajos realizados en el lote, con los productos y dosis, será determinante para seguir la trazabilidad de dicho cultivo y poder sacar valiosas conclusiones al final de la campaña.
Los softwares de monitoreo están preparados para generar órdenes de trabajo para una aplicación, siembra, fertilización y cosecha, usando insumos ya cargados en el sistema de manera práctica, con la posibilidad de generar el registro de las actividades y compartirlo con todo el equipo de trabajo.
Sabiendo todo esto, destacamos la ayuda de las herramientas digitales que hoy nos trae el mercado, por ser además baratas y funcionales. En estos meses de tanto calor el productor puede utilizar este tipo de tecnologías en el tiempo justo para atender situaciones que el cultivo esté experimentando, permitiéndole aprovechar el tiempo disponible para estar con la familia, amigos y brindando en estas fiestas.
Primicias Rurales
Fuente: Horizonte A