Buenos Aires, 16 noviembre (PR/23) — “La demanda china por cortes de calidad no tiene techo y hoy se están pagando valores similares a los de Europa no Hilton. Pero la mayor limitante para aprovechar esta oportunidad es que nuestra producción está estancada desde hace décadas”, dijo a Valor Carne Carlos Odriozola, Consejero del IPCVA por la Sociedad Rural Argentina, quien participó de la reciente exposición China International Import Expo de Shanghái (CIIE).
La muestra, una de las más grandes del mundo, fue ideada para que empresas extranjeras les ofrezcan productos a importadores chinos. Participan delegaciones de compradores de todas las provincias con el objetivo de que esos productos lleguen hacia el interior del país. Para organizar a la multitud asistente, en los primeros tres días el ingreso es limitado, con acreditación y fuertes controles de seguridad que incluyen reconocimiento facial.
“Es enorme, la verdad que me quedé impresionado. Se realiza en un moderno centro de exposiciones con forma de trébol de cuatro hojas, cada una del tamaño de un estadio Monumental de dos pisos. Además de carnes hay otros alimentos, robótica, autos, maquinaria, realmente de todo”, contó Odriozola, quien lideró la delegación argentina.
El Pabellón Argentine Beef, desarrollado por el IPCVA. En sus más de 600 metros cuadrados se instaló un restaurante de 110 cubiertos y boxes individuales para que las 19 empresas exportadoras recibieran a los clientes.
En la previa, el mayor interés era conocer de primera mano la actualidad del mercado chino. “China está demandante en volumen, pero con precios que han aflojado, sobre todo si los comparamos con los de 2019”, destacó Odriozola, a la vez que subrayó la mejor noticia: “Estamos empezando a ver cada vez más interés por cortes de mayor calidad, como los del rump & loing”.
¿China puede competir por esos cortes con Europa? “Hoy el mercado europeo está bastante pinchado, tanto por volumen como por precio. La Hilton se vende a unos USD13 mil la tonelada, cuando llegamos a venderla en USD21 mil, y China paga entre 10 y 12 mil dólares para cortes de buena calidad”, respondió.
Además, continuó, “hay que tener en cuenta que Europa cada vez tiene mayores requisitos y se va a ir poniendo más difícil. Pide certificar que no haya habido deforestación, va a pedir libre de glifosato o la trazabilidad absoluta de cada animal. Una cantidad de exigencia que no las está pagando”.
Esto no significa dejar de lado el mercado europeo. “Por supuesto que no le vamos a sacar el pie de encima, pero hay que empezar a mirar otros destinos”, consideró.
En ese camino, el segmento de los cortes de calidad a China aparece como una gran oportunidad. “Están aprendiendo a comer carne y cada vez piden más proteínas, de mayor calidad. Hay que pensar que cada kilo per cápita que aumenta el consumo significa el doble de lo que le exportamos nosotros por año: 1,4 millones de toneladas. No tiene techo”, aseveró.
¿Qué nos falta para seguir creciendo en China? “Producir más. Seguimos en tres millones de toneladas como hace más de 30 años. El freno lo estamos teniendo nosotros. Si en lugar de 700 mil toneladas pudiéramos mandar un millón y medio, los chinos los reciben. Está llegando mucha carne de Brasil y Estados Unidos, y están ávidos por más”, aseguró.
Un paso importante para crecer en el segmento de calidad es generar la cultura de consumo de carne al estilo argentino. “Se está incrementando la demanda de restaurantes y hoteles, pero no es lo que habitualmente prepara el ama de casa china. Por eso la promoción del IPCVA se amplió al consumidor, mostrándoles cómo se pueden cocinar nuestras carnes para que tengan otras alternativas”, explicó.
En ese sentido, el Instituto viene apelando al uso de influencers para llegar directamente a los consumidores. Con esta estrategia, en la CIIE, la carne argentina llegó a más de 12,2 millones usuarios de las redes sociales RED y Doujin, los que pudieron ver cómo se puede cocinar la carne al estilo argentino, pero también cómo se la puede adaptar a la tradicional cocina china.
Cuánto paga China hoy
Más allá del segmento premium, el IPCVA informó el valor negociado en la exposición para los principales productos de exportación: shin/shank (garrón y brazuelo) USD5.000 (costo y flete), cortes de la rueda UUSD5.000 (costo y flete), vaca compensada (seis cortes) USD4.200 (costo y flete), chuck and blade USD4.500 (costo y flete), vaca 23 cortes USD4.500 (costo y flete).
“Los precios están un 25/30% más bajos de lo que fue el boom chino, pero no dejan de ser muy interesantes. La baja va en concordancia con lo que está pasando en el mundo, en que los valores no están en su mejor época”, analizó Odriozola.
Sin embargo, para el dirigente de la SRA, la situación se agrava por la política cambiaria de la Argentina. “Una cosa es lo que pague China y otra es cómo lo traducimos al tipo de cambio de acá: a $350, al mix 70/30 (oficial y financieros), sumadas las retenciones y con la incertidumbre de cuál va a ser el valor real de acá en más”, planteó. Y subrayó: “como valor, China está bien a nivel mundial y te sirve para integrar una cantidad de cortes que no utilizamos acá y que provienen de vacas que no comemos, pero hay que solucionar estos problemas”.
“El interés es enorme. Estamos muy esperanzados en que se hagan buenos negocios. Falta firmar el protocolo para el producto cocido y la habilitación de plantas; estimamos que en marzo/abril recién estarán llegando los primeros embarques allá, pero va a ser un salto muy importante. Los estómagos o las lenguas hoy no le estamos sacando valor en el país y allá hay una gran demanda, es muy habitual su consumo”, destacó.
Pero más allá de las virtudes del mercado chino, Odriozola hizo una advertencia: “Ojo, tenemos que ser inteligentes y no ser chinodependientes. Para eso, hay que trabajar activamente en abrir nuevos mercados. Es algo que todo el sector ganadero, productores e industrias lo tienen muy claro”, aseveró.
Al respecto, consideró que hay que apuntar a todo el Sudeste Asiático, Corea y Japón. “Tiene que ser la próxima plataforma de aterrizaje de la carne argentina. Y no estamos tan lejos. Ahí tenés 700 millones de personas más y hay mercados de altísimo nivel”, resaltó. Y agregó que “también hay que mejorar el acceso a México y a Estados Unidos”.
Finalmente, de cara a las elecciones presidenciales, le dejó un mensaje al próximo mandatario. “Tiene que confiar en la capacidad y potencia del sector agroindustrial, en lo que puede dar, en la enorme posibilidad de transformar biomasa en carne. No dudo de que si se dan las condiciones macroeconómicas, se eliminan las trabas para exportar y se mantienen estables las reglas podríamos salir de los tres millones de toneladas y superar los cinco; así generaríamos más fuentes de trabajo y traeríamos muchas más divisas. Sería maravilloso que el próximo presidente ponga esto en práctica”, concluyó.
Por Marcos Lopez Arriazu, Jefe de Redacción de Valor Carne
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